Actualizar y modernizar los lineamientos, estrategias y prácticas institucionales en materias asociadas a la gestión de personas a nivel transversal, de manera de aportar de forma eficiente y concreta a los objetivos trazados para el periodo 2022-2024, principalmente en los ámbitos de la calidad de defensa y atención de personas usuarias y ciudadanía. 2.- Contribuir al alineamiento del desempeño individual a las orientaciones estratégicas de cargos claves en el nivel regional fortaleciendo su liderazgo.
La renovación de los Valores Institucionales y la Política de Gestión de Personas se basó en representatividad y participación, incorporando las visiones de todos los estamentos de la Defensoría. Para actualizar los valores, se trabajó con las Asociaciones de Funcionarios y expertos, realizando una encuesta a todos los funcionarios, con un 54.2% de participación. Los valores seleccionados fueron Compromiso Social, Probidad, Trato Digno a Personas Usuarias y Valor Público. Se creó una mesa de trabajo con 15 representantes de diferentes unidades y asociaciones para actualizar las políticas que velan por el bienestar y desarrollo funcionario, incluyendo lenguaje inclusivo y perspectiva de género. Además, se desarrolló un nuevo programa de formación en gestión y liderazgo, dirigido a líderes no directivos responsables de procesos clave, y se realizaron talleres en 2023 y 2024. También se premió a 71 personas en diferentes ceremonias por conceptos como “Funcionarios Destacados y Valores” y de la “Defensoría Regional Destacada”, y se lanzó un anuario diseñado en colaboración con diversas unidades para fortalecer el sentido de pertenencia.
El principal logro del “Programa de Gestión de Equipos de Alto Desempeño” fue aumentar la participación de los funcionarios intervinientes en la gestión de personas. A través de cuatro líneas de trabajo, se crearon instancias permanentes donde distintas unidades pueden contribuir al valor público, implementar políticas, acceder a formación previamente reservada a directivos y reconocer el buen desempeño.
Se renovaron los valores institucionales mediante un proceso participativo, fortaleciendo el sentido de pertenencia. La actualización de la Política de Gestión de Personas incluyó más participación de diferentes estamentos y un lenguaje inclusivo. Se capacitó en liderazgo a jefaturas intermedias, ahorrando más de 6 millones respecto al año anterior, y la transferencia de conocimientos fue superior al 90%. Además, se reconocieron a 71 personas y se diseñó un anuario internamente sin costo adicional.